En 1997, se fundó la Obra en este país. Fue creciendo rápidamente por cuanto varias hermanas de la ciudad de San José tenían familiares en Guayaquil – Ecuador, lo que facilitó el conocimiento y difusión del espíritu en nuestras nuevas comunidades.

En septiembre de ese año, se nombró a Giselle López de Romero como coordinadora regional. Varias misiones presididas por el padre Juan Abril Galán consolidaron las comunidades en Costa Rica.

Desde 2004, se realizaron trámites para el reconocimiento de la Obra ante la Pastoral Profética y, luego, se presentaron los estatutos ante el arzobispo de San José, monseñor José Rafael Quirós.

El 9 de abril de este mismo año, partió de Quito hacia San José una delegación conformada por el padre Milton Paredes, sacerdote de la Unidad, Juan Arturo Crespo y Roberto Morcillo, cabezas de la Obra, con el fin de visitar a las comunidades y elegir nueva coordinadora regional.