La Verdad y el Amor como camino a la salud

Charla magistral

Viernes 13 de mayo de 2022

La noche del viernes 13 de mayo, cincuenta y ocho personas asistimos a la charla de Juan Arturo sobre la importancia que tiene vivir en la verdad. Nos sentimos definitivamente afortunados de escucharlo predicar sobre esa verdad que nos lleva a reconocer nuestros temores, complejos, heridas y ser libres para perdonar y amar. 

Valiéndose de videos cortos y de canciones, Juan Arturo nos llevó a un viaje al interior de cada uno. Aunque doloroso; indispensable.  Nos condujo a conocer y a reconocer esas heridas que desde nuestra infancia han condicionado nuestra vida. 

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Juan Arturo momentos antes de su presentación

La infancia  

“En la infancia es donde se construye la personalidad, y marca la actitud en la adolescencia y adultez”, nos dijo Juan Arturo, remarcando que las heridas producidas por el abandono, el rechazo, la humillación, la traición y la injusticia han construido individuos decadentes, vacíos y enfermos porque no han buscado ni buscan la verdad, esa Verdad que los forma y conforma como Humanidad a imagen y semejanza de Dios. 

¿Dónde está la Verdad? 

Las sociedades de hoy, en las que la mentira campea, se han esclavizado y afincado en sí mismas, se han fabricado ídolos que no las construyen ni satisfacen, para no ver la verdad. Esa verdad que no está en la psicología, ni en la política, ni en el dinero…; sino esa que es y está en Jesús, el Verbo de Dios, porque no hay mentira en Él. 

Más allá del dolor nos lleva al amor 

Vencer el mal haciendo el bien. El amor es el único camino. Ese amor que es comprensivo, que está para los demás, que busca el bien, que no es orgulloso, que todo lo soporta.  

Nuestra vida es una historia de amor con Jesús y solo con Él podremos ser hombres y mujeres nuevos, perdonar y caminar en un amor que piensa en el otro, enfatizó Juan Arturo.  

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Juan Arturo durante su charla magistral

La reconciliación 

No arrastren cadenas, pongan perdón y sanen su interior para volverse salud para ustedes mismos y para todos aquellos que les ofendieron e hirieron, nos animó Juan Arturo. “Si el Señor vino a morir por mí, ¿quién soy yo para no perdonar a los demás?”, cuestionó a los participantes.  

La Verdad nos preexiste 

Juan Arturo concluyó su charla dejando en todos los asistentes la alegría del alma que se encuentra con la Verdad en el proceso de romper con sus ataduras, que se siente descubierta por el amor que la motiva a avanzar y a desear no volver a las heridas que tanto sufrimiento causaron.