Retiro Espiritual para Parejas

Invitación del retiro de parejas

Retiro Espiritual para Parejas

Quito, Viernes 15 – domingo 17 de noviembre

 

El padre Milton Paredes, sacerdote de la Obra “María, Madre y Reina de la Unidad”, junto con Liesel Mahnke, terapeuta encargada del área de familia, niñez y adolescencia, organizaron el retiro, en respuesta al deseo profundo de parejas que anhelan vivir la riqueza de nuestra espiritualidad y ser transformados por la ternura del Señor. Asistieron nueve parejas, en su mayoría de nuestra Obra. 

  

Hablando desde el Corazón 

 

  • “El retiro fue un verdadero regalo de Dios y llegó como respuesta a mis oraciones, porque mi esposo y yo estábamos atravesando una fuerte crisis matrimonial. Fue un encuentro con el Señor que nos puso cara a cara a la verdad de nuestra relación y nos abrió la puerta para sanar heridas profundas, a través del perdón y de descubrir y abrir los ojos, ante el poder sanador y transformador del amor de Dios hacia nosotros, en la ternura. Fue un encuentro para restaurar nuestro matrimonio. Mi esposo no quería ir al retiro y salió totalmente transformado y tocado en el corazón. Ahora, cada vez que hablamos de esta hermosa experiencia, nos conmovemos y llenamos de emoción.”, compartió R.

  • “Como la mayoría de las parejas de nuestra Obra, Luli y yo trabajamos mucho para, con la bendición y la presencia de Dios, tener un buen matrimonio. Creo que, por nuestra fidelidad, el Señor nos permitió asistir al Retiro de Parejas. Las estructuras, los hábitos y la monotonía terminan acumulándose sin que nos demos cuenta y el Señor nos quiere siempre renovados y esforzándonos. El retiro fue una oportunidad para retomar un trabajo íntimo y profundo, desde la perspectiva de nuestra intensa y hermosa espiritualidad. Un regalo inmenso que nos permitió reconectar en muchos niveles, pero especialmente, sentir la presencia de Jesús, el Dios vivo entre nosotros.”, nos dijo JP.

  • “El retiro de parejas fue un milagro de Diosito para mí y mi novio, antes de casarnos. En 8 años de relación, hemos vivido muchas cosas lindas, pero también, cosas duras, las cuales nos han marcado y lastimado. Fue un regalo de un libro nuevo con hojas limpias y listas para empezar desde cero. Sentimos como, verdaderamente, Dios y la Virgencita desataron nudos antiguos y nos regalaron un futuro lleno de ternura. Cada momento vivido nos permitió conectar profundamente como pareja, en nuestra comunicación, entrega al otro y más importante, en una comunicación mutua con Dios y la Virgen María. Durante momentos mágicos, entendimos cosas del otro que nos hacía falta descubrir y conectamos con la ternura en pareja, de una manera muy especial. Nuestro proceso de noviazgo y futuro matrimonio se siente aun más emocionante, después de haber vivido esta experiencia juntos.”, nos comentó IM.

 

  

 

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